sábado, agosto 06, 2005

Caminábamos sobre el infierno

6 de agosto de 1945. El Enola Gay sobrevolaba cielos nipones, conocía claramente su misión, pero no el resultado de la misma. A Paul Tibbets piloto encargado de dejar caer a Little Boy le temblaban las manos, quizá por el frío matutino, la altura, la vibración misma del bombardero Enola o quizá de miedo, de saberse el verdugo de un poblado llamado Hiroshima.
Después de ese día otra bomba caería en Nagasaki de nombre Fat Man, el 9 de agosto de 1945.

Las cosas no volverían a ser las mismas, la ciencia, la historia, la guerra, el hombre cambiarían para siempre... el hombre lobo del hombre, el hombre un canibal, el hombre asesino de su propia especie y la técnica, alguna vez un sueño hecho realidad, un arma fatal.
Hoy 60 años después.

“Éste es el suceso más grandioso de la historia”
presidente de EU, Harry Truman
"Caminábamos sobre el infierno"
poblador de Hiroshima, Lee Sil Gun

.Ilustración.Enrique.Ortega.

1 comentario:

azm dijo...

y las distancias siguen haciendo las perspectivas vulnerables