Me encontré con el Xun tratando de negar a Juan, a Juanito. La "madre tierra" se encargó de parirlo, con dolor, con caídas. Nació envuelto en su distintivo líquido amniótico: mezcal y cerveza, mientras las parteros del lugar cantaban tribalmente reggae y ska. El incienso de la ceremonia olía distinto, mareaba al recién nacido, mientras sus pies saltaban torpemente, se dejaban caer de las escaleras, apenas aprendía a caminar.
Xun de San Cristóbal, Xun en la Ciudad Capital. Nacido en el día de la bestia, un gris 6 de junio de lluvia, de excesos, de todo, ahí en los altos junto a los mames, los tojolabales, los tzeltales y tzotziles, junto a suizas, gringos, españoles y francesas, sus amigos lo cubrieron cuando iba a llorar, Hugo, Aldo, Pili, Ilán, Kabaio, Regina, Valeria, Joan (jefe de ceremonias), María, hombres y mujeres de todos lugares y razas, ¿hombre o bestia? Necio, retador, despilfarrador, violento, insistente, fondeador, neteador, chelero, caminador, libidinoso, hablador, mal perdedor, madrugador, grosero, inconsciente, hombre generalmente nocturno, irónicamente nombrado por niños mayas como Xun.
Acaso no conoces al Xun? No te ha hablado Juan de él? te lo ha presentado con la inocencia de un niño escondiendo el puñal? Te ha invitado? Te ha llamado? Sonreído? Gritado? Mentado al madre?
Tiemblo por el Xun que hay dentro de mi, pero que finalmente yo soYo soy.
There's a wild man in my head.
Morrissey