La noche llegó y con ella la mezcla entre el calor y el frío. Pensé en el futuro y recordé.
El viernes fue el último día del mes. Y la pequeña George Michael sabía que el calor empezaría a brindarle oportunidades de volar o quizá dormir más de lo acordado. Fueron tiempos en los que durmió por noches y días. Como una piedra. Ese momento entre las ‘chapas rojas' y el sudor, decidió ir, salir, encontrar lo que entre sueños se le había prometido. LMPP.
martes, junio 05, 2018
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