Despiertas, no sabes dónde estás. Un cuarto, unas sábanas blancas (o casi blancas), la luz de la ventana, el autobús que ruge, la cabeza que está a punto de estallar. No hay nada. A base de intentarlo empiezas a recordar. Primero sólo tienes datos muy generales, tu nombre, Xun, -¿dónde está mi liga del pelo?, -ahí está, el dolor en las rodillas es por el partido, ayer fue viernes, hoy debe ser sábado. El comfort de tomarse una cerveza, o varias, la calle, los ojos perdidos, el celular que se dice muerto, un gato que maulla, la loca que te pinta dedo. Las risas, las palabras, andar por andar. El auto que se maneja solo, ¿la cerveza sigue ahí?, ¿¡Hugo!? ... El mazo en la cabeza, Xun llamando a la puerta. Los ojos cerrados. El pelo suelto, el dolor, el placer de olvidar, y olvidar con placer. Despiertas y no sabes dónde estás.
Hay muchas cosas que me gustaría no recordar, pero ésta quizá no. Quizá.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
6 comentarios:
no me gusta tu foto a colores... a colores porque es "chun" y el azul es porque está mirando a través de tus ojos... cuando te ve eres azul, pero cuando tú lo ves es de colores?
La foto está de miedo
Hyde!
Ultimamente tu blog se me hace toda una corriente de la consciencia...
Saludos a la familia de Hugo
Te la cambio:
Despiertas, no sabes dónde estás, el dolor de cabeza es infernal y, para acabarla de joder, te duele el culo. ¿Qué preferirías en esa situación? ¿Mil pesos más o mil pesoso menos en la cartera?
jajaja dan igual los mil pesos
Publicar un comentario